Listado de películas por orden alfabético

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martes, 25 de enero de 2011

La vida de los otros (Das Leben der Anderen)






" Meta: saber todo "


Para Bubú...


Ahora sí, pasamos a analizar la última de las películas votadas por los participantes de esta página, la cinta ganadora del Oscar a la Mejor película de habla no inglesa en el año 2007, La vida de los otros. Es una película alemana del director Florian Henckel-Donnersmarck, que posiblemente os sorprenderá por su reciente película The tourist, protagonizada por Angelina Jolie y Johnny Deep. Sin irnos por las ramas, el film que nos ocupa está protagonizado por Ulrich Mule, Martina Gledeck, Sebastian Koch y otro elenco de secundarios que apoyan muy bien las interpretaciones protagonistas.

La historia se desarrolla en la Alemania del Este, la RDA, durante los años 80, en concreto desde el año 1984 hasta pasados dos años desde la Caída del Muro de Berlín en el año 1989. Durante este período conoceremos al capitán de la Stasi Gerd Wiesler, un hombre metódico, competente y milimetrado en todas sus acciones, al que se encargará la misión de espiar a una pareja de artistas: el escritor teatral Georg Dreyman y la popular actriz Cristina-Maria Sieland, por orden del Ministro de Cultura. En este contexto conoceremos mejor la fría y mecánica mente del oficial de la Stasi y el choque emocional que le producirá, fundamentalmente, ver la pasión y el amor con el que viven la pareja de artistas, y la corrupción que impera en el Comité Central del Partido.

El primer hecho lo podemos ver representado en la figura de Cristina: al principio podemos intuir cómo se enamora de ella en el teatro (no se dice explícitamente pero tampoco lo contrario) y más aún de la relación que ésta mantiene con su marido. Una relación que este hombre solitario solo puede llegar a imaginar, o intentar experimentar con prostitutas. El pilar fundamental y emocional de la película creo que coincidirían en este hecho, ya que es lo que motivará a este personaje a replantearse su vida y sus acciones. En este sentido la dirección de la película es del todo genial, ya que en ningún momento veremos ninguna conversación, pensamiento o monólogo interior que nos lleven a estas conclusiones, sino la técnica de la cámara, el montaje y la dirección sonlas que nos conducen por ese sendero (a nosotros y al personaje).

El segundo hecho lo veremos escenificado en un primer momento por el Ministro de Cultura, que con su obesidad (y semidesnudez en el coche, sus tocamientos a Maria, sus miradas lascivas) nos transmitirá un asco calculado y conectado con sus actos corruptos. Esa conversación tras la caída del Muro con Georg sobre sus relaciones sexuales con Cristina es una prueba de ello, así como el poder que manifiesta poseer incluyendo arbitrariamente a sujetos de la profesión en una lista negra, eliminando las posibilidades profesionales de estas personas, iniciando y concluyendo investigaciones de la Stasi, etc. Es importante porque su poder no deriva de su condición de Ministro (sorprendería la amplísima gama de facultades que posee respecto de su ámbito cultural), sino de miembro del Comité Central del Partido.
Pero más importante que este sujeto es el amigo de la infancia de Wiesler, que personifica la ascensión por las barbas del Partido utilizando todas las tácticas y tretas posibles para satisfacer su ansia de poder y éxito personal. Es el reflejo del trabajador y meticuloso Wiesler, y del aprovechamiento de su gloria por parte de terceros.

Estos dos puntos no son casuales o colaterales de la historia, ya que el director disecciona la vida y el clímax que se respiraba en la RDA mediante estas dos historias dentro de la misma película.

Nos pasearemos por la esfera intelectual de la Alemania comunista durante estos convulsos años y conoceremos las prácticas que llevaba a cabo el régimen para controlar todo aquellos que sus artistas podían decir o hacer. Se nos presenta una sociedad corrupta hasta la médula, en la que solo valían las relaciones de clientelismo propias de toda dictadura que se precie, con unos líderes políticos abúlicos y deseosos de encontrar trapos sucios con los que chantajear a sus ciudadanos, más que por motivos ideológicos.

Llegados a este punto parece imperativo comentar acerca de la Stasi: es el acrónimo del Ministerio para la Seguridad del Estado, era el órgano de inteligencia de la RDA, centrando sus actividades en la capital y siendo conocida por ser uno de los servicios de inteligencia más efectivos del mundo, hasta su desaparición en el año 1989. Tanto su estructura como fundamento se relacionan muy estrechamente con un órgano similar nacido en la URSS, con funciones idénticas.

La película tiene muchos puntos fuertes, como esa parte final en la que vemos a numerosos ciudadanos revisando los expedientes de inteligencia que se abrieron contra ellos (lo que vienen a ser escuchas clandestinas y seguimientos durante meses) así como los códigos en clave que denominaban a los agentes en activo.
El fotograma en el que vemos a Gerd y cómo una lágrima resbala por su mejilla lentamente (al más puro estilo Visconti) escuchando como se abrazan los artistas tras la violación por parte del Ministro sobre Cristina, sin duda un ejemplo que pone de manifiesto algunas notas de aquél cine de arte y ensayo prácticamente desaparecido actualmente.

Sin duda es auténtico arte realizado con una cámara, una película que todo el mundo debería ver.

sábado, 1 de enero de 2011

El enemigo público (The public enemy)






" Significa que comprarán nuestra cerveza o no comprarán ninguna "




Me váis a disculpar que mantenga mi informalidad retrasando La vida de los otros, pero tengo problemas con la crónica, de modo que os ofreceré de entrante esta pequeña joya de los años 30.

Aunque esta no es de las más antiguas películas gangsteriles, sí creo que es un buenísimo ejemplo para comenzar nuestras andanzas en los años dorados de este género, entre los años 30 y 40, esta es de 1931 concretamente. Está dirigida por William Wellman, aunque primero se pensó en otro sujeto para asumir la responsabilidad hasta que el propio Wellman presionó al productor para que le diese el trabajo, porque se había enamorado de la historia y del personaje de Cagney. Está protagonizada por James Cagney, en el papel del gangster irlandés Tom Powers, y por Jean Harlow. Además, Wellman ya venía con un par de éxitos anterioers que le sostenían como una buena opción para llevar a cabo con éxito el film.

La historia fue una adaptación de un relato sobre un conjunto de biografías de gangsteres de la época, en este caso basada en un matón irlandés que consiguió subir unos peldaños en el escalafón de la mafia norteamericana.

Veremos una historia dividida en 4 momentos históricos:

- 1909: donde se inicia la historia con un par de raterillos que acaban pasando a asuntos mayores en la banda de un jefecillo del barrio, Patty Nose. De aquí darán el salto a cuestiones mayores. Asistiremos a la presentación de la familia, con una autoritaria figura paterna, que además es agente de policía. No es que la historia se oriente de un modo sociológico, como sí ocurrirá años más tardes con Los violentos años 20, sino una forma de presentar la rebeldía que dominará la vida de Cagney, sublevándose contra toda forma de autoridad, legal o ilegal.

- 1915: donde esos niños se han convertido en adolescentes que conforman una auténtica banda, y con sus primeros revólveres asaltarán un camión de pieles. También veremos los antagonismos que suponen los dos hermanos powell, uno de ellos un sujeto sin escrúpulos que quiere hacerse rico a toda costa, mientras que el otro cree en el trabajo y la honradez. Es curioso que este segundo será despedido por robar monedas de 5 centavos, lo que parece intentar desprestigiar este personaje, mostrando su hipocresía frente al cinismo de Cagney que, sin embargo, irá de frente toda la película.

- 1917: estalla la guerra y los caracteres de ambos hermanos se acentúan cuando el icono honrado decide alistarse en la marina para defender a su país, mientras que Cagney consolida su posición formando parte de la banda de Pat Ryan, otro irlandés del barrio que ha sabido ver las ventajas que podrán obtenerse de la Ley Volstead (por la que se prohibía la venta e ingesta de bebidas alcohólicas con una graducación superior a 0,5).

- 1920 en adelante: será el retrato de la caída del mafioso, con el asesinato de su protector Nails Nathan el resto de bandas comenzarán a acosarlos a tiros y granadas, lo que desencadenará en la muerte del mejor amigo de Powers. Finalmente veremos como este entra en un restaurante atestado de sus rivales con dos revólveres en mano.

La película está rodada con gran maestría, con una gran violencia en sus escenas, destacando sobre todo el asesinato de Patty Nose mientras toca al piano una canción que el enseñó a Powers cuando era un niño, o la última escena de la película en la que aparece Powers después de haber sido secuestrado del hospital. Sorprende porque en ningún momento se verán relacionadas la violencia con los sujetos que la padecen, debido a la fuerte censura que había en la época, pero esto no resta de impacto las escenas. Deberían mostrarse a algunos directores actuales que piensan que la violencia gratuíta es necesaria para impactar al espectador, cuando, como Hitchcock nos muestra también, la violencia debe ser parte integral del film, lo justo y necesaria.

También destaca la interpretación del propio Cagney, centrándose toda la fuerza de su interpretación en los ojos y miradas que la cámara sabe explotar perfectamente con los primeros planos. Otro elemento importante de la cinta es la violencia hacia las mujeres, extraída de otras historias sobre matones famosos.

Estas películas tenían un fuerte tono documental, ya que representaban la realidad de las calles de Chicago, Atlantic City o Nueva York, pero pronto hará aparición la censura que cambiará los roles de personajes como Cagney o Edwuard G Robinson, para dejar de interpretar a maleantes y pasarse al otro lado de la ley. En el propio film los cuadros de diálogo intercalados intentan moralizar a la sociedad haciendo responsable de la existencia de este tipo de personajes a la propia madre del protagonista y a la sociedad, entendiéndolos como un problema que debe ser erradicado.

Es muy interesante también ver todas las tretas que realizarán con el alcohol ilegal, tantas veces tratado en los films adaptados en los años 20, pero pocas veces se nos muestrá la práctica real de la actividad gangsteril, como ese camión cisterna que llenan de alcohol o los tratos con los productores de cerveza que tienen las fábricas paradas.

En resumen, los orígenes del cine negro, indispensable para quiénes se inicien en el género.