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sábado, 28 de mayo de 2011

Tambores lejanos (Distant Drums)





" Nadie puede sobrevivir en ese pantano "



Me complace regresar al Western, género muy abandonado en el blog, con este pequeño especial "Guerras indias", empezando por Tambores Lejanos, película dirigida por el genial Raoul Walsh y protagonizada por Gary Cooper (en el cartel parece el hermano gemelo de James Stewart) y la bellísima y rubísima Mari Aldon.

La historia se narra en off por la voz de Richard Webb, que interpreta al oficial de marina Richard Tuts, destinado en Florida para formar parte de una operación ideada por el capitán Quincy Wiatt contra los indios Semínolas de la península de Florida, momento en que se encuentran especialmente revolucionados gracias a los rifles que consiguen de contrabando por medio de unos renegados mexicanos. Nos encontramos en el año 1840, una fuerza de 40 hombres deberán internarse en los pantanos de Florida y sortear indios, mosquitos, caimanes y aguas pantanosas para asaltar el fuerte de los renegados, antigua construcción española bajo aquella ocupación, y dinamitar cañones y rifles que allí se almacenen.

En verdad, más que un western podría ser una cinta bélica, al igual que ocurre con Los indestructibles, Mayor Dundee o Misión de Audaces, porque la cámara, las escenas y los decorados son más propios de una película ambientada en las selvas vietnamitas o japonesas. Sin más, recuerdo ahora mismo una escena en que nuestros protagonistas se esconden entre la maleza dejando pasar una patrulla de indios, mientras me imaginaba a unos intrépidos marines americanos eludiendo una patrulla japonesa. Estos pequeños detalles están presentes en toda la película. Hay un gran acierto en dotar de un toque especial a los indios Semínolas, no son como los típicos indios de plumas que vemos en las cintas ambientadas en las Black Hills o en Nuevo Mexico, etc, sino que tienen particularidades en sus ropajes y joyas, mucho más exóticos vaya. Aunque este acierto se pierde estrepitosamente a la hora de ver como forman militarmente frente a los yankees en los combates, sinceramente no me imagino ese tipo de estrategia militar en un pueblo nativo. Más bien utilizaban escaramuzas, trampas, emboscadas, pero nunca atacaban frontalmente y en línea recta o bajo trincheras, todo lo contrario, a no ser que fuesen una fuerza superior y a caballo.

Pero es cierto que estamos ante un film de Walsh, lo que es sinónimo de espectáculo, de aventuras y de calidad, aunque la calidad que puede derivar de los western en los años 40, 50 y 60, más preocupados por el mensaje propagandístico y patriotero que en cuidar la ambientación histórica de sus historias. En cualquier caso son el origen del género, y no conviene menospreciarlos por sus defectos.

La verdad es que recuerdo en estos momentos aquél comentario de Tony Soprano preguntándose dónde se encuentran aquellos héroes americanos como John Wayne o Gary Cooper, que hacían lo que tenían que hacer sin pestañear ni lloriqueos, y es cierto que estamos en esa época. La época de los Bogart, Stewart (aunque este es de otro ala) Heston, etc. Son actores que interpretan a un personaje recurrente, para nada un héroe, más bien antihéroe que realiza heroicidades por nada, por no temer a la muerte y no tener nada que perder. Personajes solitarios que aparecen a lo lejos con ese aura épica a sus espaldas, al estilo de Solo ante el peligro.

El argumento es bastante original, así como la complicación de la trama, y el rodaje en los pantanos muy entretenido: esto es de valorar en unas películas muy tópicas y recurrentes, en las que siempre se veían las mismas escenas y luchas entre indios y cowboys. Como curiosidad, os diré que en éste título es donde se utilizó por primera vez uno de los recursos técnicos más utilizados a lo largo de la historia, desde La carga de los jinetes indios, Tierra de Faraones, Star Wars, Reservoir dogs o Malditos Bastardos: el grito de Wilhelm, ese famoso alarido de los soldados secundarios al morir, que nos ha acompañado a lo largo de toda nuestra cinéfila existencia. Ocurre en el momento en que uno de los soldados más rezagados es atacado por un caimán (que no cocodrilo, ya que estos últimos tienen el morro distinto).

En resumen, una buena película de indios de las de antes con un punto bastante más original que otras del mismo tipo.

10 comentarios:

  1. Me parece estupenda tanto la reseña como la idea de inclir esta peli en el blog.
    Primero pq es una joyita, de esas que crean afición al cine, mezcla aventuras y oeste con una frescura y talento encomiables.
    Segundo pq es cine con mayusculas, no por s trascendencia, pero que pesos pesados Walsh y Cooper, en una peli con seminolas bien retratados,caimanes tremednos, una preciosa fotografia, tipos de una pieza, con s delo final, romance que no estorba a la trama y tiros en medio de unos bosques y pantanos poco transitados por el género pero muy agradecidos.
    Pese a las licencias que piru bien comenta y qe tb se dan en el cine actual , con fines más oscuros que resaltar el espíritu pionero se trata de una gozada a todo color. Ahora mismo recuerdo otra buena peli con escenarios similares, Traición en Fort King, con coloridos trajes ,pantanos,Rock Hudson de bueno, y Anthoni quinn haciendo el indio.
    Creo recordar que tb mencionan algo de los semínolas en una de John Sayles.
    En fin, yna explosión de vitalidad, buenos y malos que recomendaría para todos los amantes del cine y por supuesto para los más pekes.

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  2. Estoy contigo en tu entusiasta visión de ésta película Edu, creo que era interesante porque no deja de ser una peli de indios contra vaqueros, pero tiene un algo especial que la diferencia y la hace atractiva. Me ha gustado mucho la verdad, es muy entretenida y los fallitos son pequeñitos. Además Walsh es estupendo para este tipo de producciones, de espectáculo y aventuras.

    Un abrazo Edu!

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  3. Buenas Piru

    Este es uno de esos títulos artesanales dirigidos por el casi siempre eficaz Raoul Walsh. Y de hecho, si te fijas, es muy atinado tu comentario sobre que la historia que cuenta podría ser bélica, ya que, de hecho, el argumento puede considerarse una variación del grán clásico de este director: Objetivo, Birmania. Cambia los pantanos de Florida por la jungla birmana, y los indios semínolas por los japoneses, y tenemos la misma historia. Y en ambos casos con dos actores de carisma, Gary Cooper y Errol Flynn, respectivamente.

    En fin, lo dicho, una de esas películas de "las de antes".

    Saludos

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  4. Von Kleist, gracias por tu comentario y me alegro de que te haya gustado la crítica. Lo cierto es que no había caído en la similitud con la misión de Objetivo Birmania, pero es cierto que tendríamos un argumento prácticamente idéntico. Son años en los que la fórmula para conseguir el éxito en taquilla se repetía como el teorema de pitágoras, con esos cabezas de cartel también.
    Totalmente de acuerdo en que es de esas películas de antes, al más puro estilo Hollywood. El mérito que tienen es que no mueren con el paso del tiempo, siempre te dejan un buen sabor de boca.

    Un saludo Herr Kleist!

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  5. Una peli entretenida del gran Walsh, con su sentido del ritmo tan adecuado para este tipo de aventuras. Una peli del oeste que no lo es tanto, como dices. Recuerda a otra del mismo tema: "Traición en Fort King" (Seminole) con Rock Hudson y Anthony Quinn, del bueno de Boetticher.
    Saludos!

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  6. Muchas gracias por tu visita Ethan, cómo tu bien dices, Walsh era un maestro para realizar este tipo de historias. Veo que también a ti te recuerda a Traición en Fort King, como a Edu, así que tendré que prepararla pronto ;)

    Un saludo!

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  7. Recuerdo haberla visto hace mucho tiempo, cuando era pequeño. Por aquél entonces claro no tenía ni idea de quién era Gary Cooper ni Raoul Walsh, solo sabía que me gustaban las películas de indios y vaqueros. Tengo que revisionarla para volver a disfrutar de Cooper, probablemente el mejor actor de western junto con Eastwood.

    Un saludo

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  8. Gracias por pasar Cutlas, la verdad es que es una de esa pelis de siempre con indios y vaqueros, en ese sentido no defrauda en absoluto. Es verdad lo que dices de Cooper e Eastwood, aunque incluiría a James Stewart y John Wayne. A mi personalmente me gustaba más Stewart.

    Un saludo!

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  9. Walsh y Gary Cooper. Efectivamente ya entonces no había hombres tan hombres como Gary Cooper.
    Es muy autparódica la escena en la que Cooper se afeita en seco con un cuchillo de caza tipo Cocodrilo Dundee, ante la mirada de la rubia y el sufrimiento referido del teniente uniformado.

    ¿Ninguno menciona el guiño de Almodóvar en su título homofóno?

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  10. Gracias por paar Enrique y bienvenido al blog. Es buenísima la escena que comentas con el afeitado a machete en seco jejeje y mejores todavía las miradas de la rubia y el sargento. No había caído en el guiño de Tacones Lejanos, muy buena tu apreciación.

    Un saludo

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