viernes, 16 de marzo de 2012
Hoffa (un pulso al poder)
" El crimen organizado en el mundo del trabajo "
Hoffa es una interesante película que dirigió Danny De Vito en el año 1992 con un resultado interesante, aunque es cierto que no pasará a la historia del género ni mucho menos, no es un salto de actor a director como sí lo supuso Clint Eastwood, pero no por ello vamos a dejar de comentarlo como curiosidad. Protagonizada por el propio De Vito, Armand Assante, John C Reilly y Jack Nicholson, la historia se centrará en el movimiento sindicalista-obrero en los EEUU durante la década de los años 30 a 70 en el sector de los transportes. Concretamente en la figura del sindicalista James Hoffa, un camionero que harto de los abusos producidos por los patrones decidirá crear uno de los más importantes e históricos sindicatos del otro lado del charco, la "Hermandad Internacional del Transporte".
El señor Hoffa acabará dirigiendo en la sombra el sindicato, lejos de los micrófonos y televisiones, aunque finalmente no podrá escapar a los flashes de la prensa al ser acusado (por el fiscal Robert Kennedy) de haber dejado la puerta abierta a la mafia italo-americana del sindicalismo yankee. Y lo cierto es que históricamente así fue como ocurrió, los Kennedy tenían una cruzada personal contra Hoffa (como bien resalta la película) para lograr meterle entre rejas y explotar la información que podía contener sobre determinados circuitos mafiosos. Estos se habían manifestado ya en los piquetes y huelgas que había promovido el sindicato, actuando como fuerza y músculo contra las cargas de la policía e incluso contra los revienta-huelgas de las grandes empresas. Todo ello levantó suspicacias entre la fiscalía del Estado, aunque no hay que olvidar que el clan Kennedy siempre tuvo intereses más oscuros que los que el defenestrado Jack quiso mostrar. Esta parte de la película está bien retratada, los contactos con los circuitos mafiosos y el tema político que pretende meterse de lleno en el sector del transporte. Como bien sabemos, los sectores estratégicos para provocar una huelga fuerte son los servicios, industria y transporte, por lo cual el sindicato era un caramelo goloso para todos los intereses creados a su alrededor, no sólo los mafiosos. Hoffa fue consciente de este hecho y lo utilizó en su propio beneficio, aunque es cierto que también benefició en cierto sentido a los propios transportistas.
Es interesante de ver también la evolución de ambos personajes desde sus inicios en contextos draconianos al más puro estilo Dickens, hasta aquélla limusina aparcada en un restaurante cualquiera de carretera de los EEUU. Sobre el final de Hoffa, lo cierto es que nunca se supo qué ocurrió realmente, aunque la solución que nos da la película probablemente se acerque a la realidad, dado el enfrentamiento que supuso la salida de la cárcel de Jimmy con los actuales jerifaltes sindicales.
Es interesante señalar que el famoso autor de novela negra James Ellroy le dedicó un importante volumen en su Trilogía de América al tema Hoffa-sindicatos-Mafia, el título era América, y es interesante cómo narra las relaciones entre la mafia y Jimmy, así como con el clan Kennedy. Muy recomendable leer dicha trilogía por cierto.
Nicholson nos regalará una de sus histriónicas interpretaciones como el sindicalista Hoffa, y De Vito será su segundo de abordo, personalmente disfruté mucho más con la actuación del segundo, creo que es el verdadero puntal y motivo de interés para ver la película. En la dirección no deja de ser algo más bien discreto. Es una labor que no chirría en ningún momento, pero tampoco deja una mano que pase a la Historia, que recordemos como el Sin perdón de Eastwood por ejemplo, como bien se ha puesto de manifiesto con el paso de los años. Es una película que cuenta demasiadas cosas con un ritmo no excesivamente potente, demasiados secundarios que aparecen y desaparecen mareando al espectador, y muchos de ellos realmente conocidos pero actuando con el piloto automático, lo que resiente decisivamente el resultado final. Todo ello hace que estemos ante un producto que, lejos de contar una gran historia que podría haber dejado una película épica sobre la mafia, se queda a medio gas. Sin duda, había "chicha" más que suficiente para dejar un resultado superior.
En resumen, un intento fallido de hacer una gran película americana sobre uno de los personajes más importantes de la Historia americana del S XX, uno de los personajes más oscuros y misteriosos, del que nunca más se supo desde su desaparición en el año 1975.
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Pues vaya, tenía ganas de ver la incursión de mi querido Danny de Vito como director, y más si está Nicholson de por medio! Y con la pintaza que tiene el argumento, qué pena...
ResponderEliminarDe todas formas, me ha dado ganas de verla, sobre todo por el personaje de Hoffa, como bien dices, hay mucho misterio alrededor de su persona.
Un beso Paulie!!
Dios Anna! menos mal que has comentado porque temía que esta entrada se iba a quedar totalmente huérfana! jaja, pues sí el resultado no es que sea para tirar cohetes pero si disfrutas con DeVito, es tu peli.
ResponderEliminarPor cierto, tenemos que ir al Nueva de una maldita vez, deja esos carnavales del diablo y vente de una vez por la capital a escuchar a los guajes!
La película tiene dos problemas: en primer lugar trata de contar demasiado y al final termina por no contar casi nada. Es imposible abarcar toda la vida de Hoffa en un solo metraje. Comparado con biopics como Ike de Tom Selleck (que sólo cuenta el día D) o Waterloo (que sólo cuenta la batalla final) se nota la falta; se salta de una cosa a otra demasiado rápido, y no se tiene una historia sino una suseción de Skechts que individualemente considerados no son malos, pero que como conjunto no tienen ni la intriga, ni la trama que sirvan de "pegamento" a la historia y lo mantengan a uno pegado al asiento. El problema es que no hay introducción, ni nudo ni desenlace, y por tanto no hay suspenso. Te esperas que te expliquen cómo va a salir de esta...y de repente lo hace por arte de magia, sólo porque se saltan a la torera cómo. Te lo meten de golpe en un aprieto...que no te emociona porque no sabes cómo empezó y ya te malicias que no te van a explicar de que forma se escapará...y así todo el metraje. Digamos que es el problema clásico de este tipo de pelis. En Hitler el reinado del mal y La Dama de Hierro o Churchill dentro de la tormenta pasa lo mismo. Quién mucho abarca poco aprieta. Pero el campeón de campeónes en este error es lamentablemente Alatriste, que ya es el colmo...
ResponderEliminarEl segundo problema es que tradicionalmente los líderes sindicales son buenos buenísimos luchadores contra la opresión de los malos malísimos patronos. Y aquí no ocurre así. Eso es darle un planteamiento muy interesante como vuelta de tuerca a la película, pero no se explota como debiera. Y creo que es lo que impide que sea una Obra Maestra. Da la impresión de De Vitto no quiso desemascarar que corruptos pueden ser los sindicatos porque son una especie de Vaca Sagrada de la sociedad moderna ("los líderes sindicales SIEMPRE tienen que ser los buenos y los patronos los malos") y no quiso aventurar demasiado la incorrección política de llegar digamos al extremo de un Orson Wells en Ciudadano Kane donde se desmonta otro mito ("la libertad de prensa SIEMPRE es buena en sí misma") sin miedo a la incorrección política que eso implica. Me parece que esa falta de valor de De Vitto fué su perdición como director. Porque como actor compartir con nada menos que Nicholson y destacar más (¡Siendo el secundario!) es toda una hazaña.
ResponderEliminarDe todos modos la corrupción sindical es un tema que siempre le "cuesta caro" al director que se atreve y lo toca: que lo diga Elia Kazán
¿Qué se hizo de Hoffa? Se esfumó y a partir de entonces no hay más que especulaciones. Dicen que cuando mataron a Bob Kennedy su flota de camiones fue la única que no respetó el día de duelo oficial. Creo que Peter Boyle interpretó a Hoffa en una serie de televisión. Muy interesante el post. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola Petrossian, muchas gracias por tus comentarios, estupendo verte de nuevo por estos lares.
ResponderEliminarSobre el primer problema totalmente de acuerdo, el tema da para mucho más, para contar cosas muy interesantes acerca de la Historia más reciente de América, y DeVito lo sabe, y lo intenta, pero no llega.
Sobre el segundo problema, yo creo que la película no rehuye mostrar a los líderes sindicales como unos embusteros y manipuladores, como meros comparsas de mafiosos y relaciones de poder. Quizás sí tengas razón en que ofrece una versión muy edulcorada de Hoffa, que debió de ser telita el hombre. Pero siendo un bio-pic no sorprende para nada que lo haga, la verdad, aunque no está justificado por supuesto.
Yo también advertí esa circunstancia, cómo el secundario que es DeVito se come vivo al protagonista sin despeinarse. La verdad es que es un grandísimo actor y Nicholson no ofrece una de sus mejores tardes.
Lo de Alatriste es para abrirse las venas, sobre todo si eres fan de las novelas.
Un saludo
Hola Miguel, muchas gracias por comentar, la verdad que el personaje era inquietante como poco, y su final fue igualmente sospechoso. Me alegra que te haya gustado la entrada,
ResponderEliminarUn abrazo!