
" Mi cabeza no puede asimilarlo "
Pasamos a analizar Vals con Bashir, antes de meterme con El último rey de Escocia, dirigida y escrita por Ari Folman, de origen israelí. Es una cinta realizada en animación, que ha recibido numerosos premios a nivel internacional como el Oscar, el Bafta o el Globo de Oro, así como el premio a la mejor película en el festival de cine de Israel. Me gustaría adelantaros que me centraré más en la historia y la crítica que en las técnicas utilizadas en la película o la producción de la misma, ya que esos son temas bastante más técnicos de lo que se pretende en este blog.
La historia trata sobre sucesos acontecidos al propio directos durante su período de instrucción en el Ejército de Defensa israelí, ya que en este país el servicio militar es obligatorio, incluso un mes al año deben prestar servicios en misiones especiales o en checkpoints (como puestos de aduanas pero a lo bestia, son más bien obstáculos móviles que se interponen entre los núcleos de población palestinos con el único fin de disgregar a la población y perturbarles lo máximo posible), por lo que podemos decir que la sociedad israelí está perfectamente militarizada y preparada para movilizar un importante contigente de ciudadanos-soldados.
En este caso vemos como el protagonista se encontrará con un compañero de milicia que le relatará sus recurrentes pesadillas sobre una manada de perros que le persiguen y acosan en su casa. El narrador atribuye estas visiones a sucesos acontecidos durante la Guerra del Líbano de 1982: recordenmos que este conflicto fue conocido como la primera guerra del Líbano, o también Operación de Paz para Galilea, por la cual Israel invadió el sur del Líbano para expulsar a las milicas de la OLP del país.
Con motivo de esta revelación, un tanto siniestra, ari recordará un viejo sueño en el que se veía a sí mismo junto a dos compañeros bañándose en una playa de Beirut, cerca de uno de los más tristemente célebres arrabales donde se agrupaban los campamenos de refugiados palestinos, Sabra y Chatila. De modo que pasará a visitar a un conjunto de personajes de distinto tipo para lograr recordar qué es lo que ocurrió durante esta operación militar que ha sido eliminado de su cerebro, algo común en los soldados que sufren de estrés post traumático al regresar a su vida civil, eliminando pasajes de su memoria para poder olvidar las tropelías que vieron o hicieron.
La verdad que la historia es magnífica, por lo bien que está relatada como por recuperar el terrible suceso de la masacre de Sabra y Chatila, donde los soldados israelíes asesinaron a sangra fía a cientos de refugiados palestinos. La excusa: eliminar las fuerzas de la OLP escondidas entre los refugiados. La triste verdad: muy pocos de aquellos ajusticiados eran en verdad "terroristas", ya que fueron asesinadas en sus casas familias enteras, sin discrimnar entre hombres, mujeres, niños o ancianos. Todo lo que pueda relatar con palabras quedará irrisorio comparado con la realidad de lo ocurrido, os invito a todos que busquéis información por vuestra cuenta.
Lo cierto es que el conflicto árabe-israelí es complicado e irreconciliable: recordemos que su origen se remonta al final de la IIGM, aunque hay ramificaciones hacia diferentes acuerdos que el presidente Wilson firmó durante la IGM, momento en que se descubre ante el mundo el horror que ha supuesto el holocausto, especialmente para el pueblo judío. Un complejo de culpabilidad que los más férreos defensores del sionismo (OJO!!!! digo SIONISMO y no SEMITISMO, pues la eterna crítica de Israel es acusar a todo aquél que no aprueba sus matanzas de antisemita (antijudío), cuando en realidad se repudia su sionismo (superioridad de la raza judía) al hilo del pangermanismo, panarabismo, etc) aprovecharán para reivindicar el territorio palestino bajo su propiedad. A partir de este momento se inicia un genocidio y exterminio masivo de miles de refugiados palestinos por parte del pueblo de Israel, al igualq ue hicieron con ellos los nazis, con la complicidad de Europa y EEUU que nada se atreven a decir o hacer, no vaya a ser que el lobby judío retire la plata depositada en los Gobiernos de medio mundo.
Y de aquí podemos saltar al Muro de la Verguenza, construido para separar los territorios palestinos (los que quedan) de Israel, cuando en realidad no es más que una excusa para comer territorio a las fronteras fijadas en el año ´48 (otra muestra más del "respeto" israelí por la legalidad internacional) anexionándose los mejores recursos y tierras, aunque para ello haya que separar familias al dividir pueblos enteros por el muro.
También hasta el más reciente enfrentamiento asaltando una Flotilla de la Libertad, con ayuda humanitaria para la franja de Gaza, acosándolos con comandos y francotiradores, llegando a asesinar vilmente a dos activistas. Y ¿cuál es la condena internacional? ¿cuál es la condena del Gobierno de mi país? (me perdonaréis que critique primero mi casa): pues ninguna.
Sin duda podríamos dedicar cientos de entradas para esta cuestión, pero si volvemos a la película nos centraremos mejor en la visión que el propio pueblo judío tiene sobre estas tácticas de terrorismo de Estado. Vemos como ellos niegan ver la realidad, a pesar de que la tengan delante de las narices, y es que es cierto. No nos engañan, no quieren ver lo que ocurre. Para ellos hay un sentimiento de defensa mutua que el propio Estado les ha metido en el cuerpo: somos el blanco de todo el mundo, tenemos que defendernos primero y atacar si es necesario para que jamás vuelva a ocurrir un genocidio contra nuestro pueblo.
Sin duda partimos de posiciones muy comprensibles por ambos bandos, pero me temo que hemos llegado a un momento en que la estrella de David está exterminando día a día a un pueblo en connivencia con todos aquellos que prefieren seguir haciendo negocios antes que defender los Derechos Humanos. Creo que ha llegado el momento de preguntarse si podemos seguir viviendo de esta forma, sobre cuál es el mundo que queremos para habitar.
Para aquellos que queráis más información os pongo una página de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina y Oriente Medio:
www.unrwa.org
www.acnur.org